El término backdoor flush draw es ampliamente utilizado en el póker, pero muchos jugadores no lo entienden completamente o no saben cuándo jugarlo de manera óptima. Este tipo de jugada puede convertirse en una poderosa arma cuando se maneja correctamente, permitiéndote ganar grandes botes con una mano inesperada.
En este artículo, exploraremos qué es un backdoor flush draw, cuándo vale la pena jugarlo y qué factores debes considerar antes de comprometer fichas en esta situación.
Un backdoor flush draw ocurre cuando necesitas ligar dos cartas consecutivas del mismo palo en el turn y el river para completar un color. A diferencia de un flush draw regular, donde solo falta una carta para completar el color, aquí necesitas mejorar en dos calles.
Ejemplo práctico:
Flop: K♠ 7♦ 2♠
Tu mano: A♠ Q♦
Si en el turn aparece otra ♠ y en el river una tercera ♠, completarías un color backdoor.
El backdoor flush draw es una jugada que puede sorprender a los rivales, ya que es más difícil de detectar.
Dado que necesitas ligar dos cartas consecutivas del mismo palo, las probabilidades de completar un backdoor flush son bajas.
Probabilidad de ligar color backdoor tras ver el flop:
Turn: 19.1% (aproximadamente 1 de cada 5 veces recibirás la carta del mismo palo).
River: 19.6% (si logras conectar en el turn, hay otra posibilidad del 19.6% de completarlo en el river).
Probabilidad total de completar el color: 4.2%
Dado que la probabilidad es baja, jugar un backdoor flush draw sin un plan claro puede ser un error costoso.
Aunque completar un backdoor flush es poco frecuente, hay situaciones en las que puede ser rentable seguir en la mano:
Si tienes una mano con otras oportunidades de mejorar
Ejemplo: A♠ Q♦ en un flop con un backdoor flush draw y overcards.
Aquí tienes outs adicionales para mejorar a top pair o escalera, además del color.
Si tienes posición en la mano
Jugar en posición te permite controlar el bote y decidir si seguir apostando o retirarte.
Si el rival muestra debilidad
Si tu oponente pasa o apuesta poco en el flop, puedes tomar la iniciativa y semi-farolear la mano.
Si el bote ya es grande y vale la pena el riesgo
En torneos o partidas con stacks profundos, a veces puede ser rentable perseguir este tipo de jugadas.
Sin embargo, jugar un backdoor flush draw sin plan es un error. Asegúrate de que las condiciones sean favorables antes de comprometer fichas.
Moraleja: Un backdoor flush draw no es suficiente motivo por sí solo para seguir en una mano. Úsalo estratégicamente y solo cuando haya otros factores a tu favor.
Una forma de jugar los backdoor flush draws es utilizar un semi-farol, lo que te permite:
Ejemplo: En un flop como Q♠ 9♦ 5♠, si tienes A♠ J♦, podrías apostar en el flop como semi-farol y continuar en el turn si cae otra ♠.
¿Alguna vez has completado un backdoor flush inesperado?
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