Los juegos de cartas de póker en verano son un clásico. Son una manera estupenda de pasar las tardes y son una forma alternativa de disfrutar del tiempo libre estival. Hay muchos tipos de juegos de cartas que con la baraja de póker se pueden jugar, pero muchos creen que, si no se es más de 3 o 4 personas, es imposible jugar.
¡Error! Juegos de cartas de póker para 2 jugadores hay muchos, y precisamente en este post vamos a hacer un repaso por algunos de los juegos con cartas de póker más chulos para disfrutar entre dos.
Cuando buscamos una actividad entretenida para dos personas, las cartas de póker ofrecen varias opciones que son tanto fáciles de aprender como divertidas de jugar. Estos juegos de cartas de póker para 2 no solo son ideales para pasar el tiempo, también permiten desarrollar habilidades, la estrategia y también la toma de decisiones.
Objetivo: Conseguir todas las cartas del mazo.
Cómo se juega: En Guerra de Cartas, el mazo completo se reparte entre los dos jugadores, quienes mantienen sus cartas boca abajo. En cada ronda, ambos jugadores voltean la carta superior de su mazo al mismo tiempo.
La carta con el valor más alto gana la ronda, y el jugador que la tiene se lleva ambas cartas, colocándolas al final de su pila. Si ambos jugadores voltean cartas de igual valor, se inicia una "guerra". En la guerra, cada jugador coloca tres cartas boca abajo y luego una cuarta carta boca arriba.
El jugador con la carta boca arriba más alta gana todas las cartas jugadas en esa ronda. El juego continúa hasta que un jugador ha recolectado todas las cartas del mazo y es declarado ganador.
Objetivo: Deshacerse de todas las cartas
Cómo se juega: En este juego, todas las cartas se reparten equitativamente entre los dos jugadores. El objetivo es simple: deshacerse de todas las cartas. El primer jugador coloca una carta boca arriba en el centro de la mesa. El otro jugador debe colocar una carta de valor mayor y de la misma pinta, o cualquier carta de otra pinta.
Si no puede hacerlo, debe robar una carta del mazo restante (si es que hay cartas restantes) y pasar el turno. El juego continúa hasta que uno de los jugadores se quede sin cartas, ganando la partida.
Objetivo: Llegar a exactamente 58 puntos
Cómo se juega: Cincuenta y Ocho es un juego sencillo pero que requiere habilidad para sumar y una estrategia cuidadosa. Se reparten todas las cartas entre los dos jugadores. Cada jugador, en su turno, coloca una carta boca arriba en el centro de la mesa.
Las cartas numéricas suman su valor nominal (por ejemplo, un 5 vale cinco puntos), las cartas con figuras (J, Q, K) suman diez puntos, y los ases pueden valer un punto. El objetivo es que las cartas jugadas sumen exactamente 58 puntos. Si un jugador no puede colocar una carta sin que la suma total de las cartas sobrepase los 58 puntos, pierde la ronda, y el otro jugador se lleva la victoria.
Cuando se trata de juegos de póker de cartas, hay algunos que admiten más jugadores pero que también son muy disfrutables entre dos. Es el caso de estos que te comentamos a continuación:
Objetivo: Obtener la mano con un valor lo más cercano posible a 7,5 puntos sin pasarse.
Cómo se juega: En Siete y Medio, cada carta numérica vale su valor nominal, las figuras valen medio punto y los ases pueden valer uno u 11 puntos, dependiendo de la estrategia del jugador.
Al comienzo del juego, se reparten dos cartas a cada jugador, una boca arriba y otra boca abajo. Los jugadores pueden elegir pedir más cartas para acercarse lo más posible a 7,5 puntos, pero si en algún momento un jugador sobrepasa los 7,5 puntos, queda eliminado de la ronda.
Después de que todos los jugadores han decidido si quieren más cartas o no, se revelan las cartas boca abajo, y el jugador con el total más cercano a 7,5 sin pasarse gana la ronda.
Objetivo: Tener la mejor combinación de cinco cartas.
Cómo se juega: El Stud Poker de Siete Cartas es otro clásico del póker. A diferencia de Texas Hold'em, no hay cartas comunitarias en este juego. En su lugar, cada jugador recibe siete cartas individuales, tres boca abajo y cuatro boca arriba.
Las rondas de apuestas se intercalan con la revelación de cada carta nueva. Al final, cada jugador selecciona las mejores cinco cartas de sus siete para formar su mano final. El jugador con la mejor combinación de cinco cartas gana la mano.
Este juego requiere una buena memoria y la capacidad de evaluar las probabilidades con las cartas visibles en la mesa, lo que lo convierte en una opción emocionante para quienes disfrutan de un desafío más técnico en el póker.
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