Aunque muchos consideran que el
póker es solo un juego de azar, lo cierto es que hay muchos más factores detrás
de este tradicional juego de cartas. Es cierto que la suerte tiene mucho que
decir en el devenir de la partida, pero la disciplina, las matemáticas, la
probabilidad y la capacidad de lectura e interpretación son otros elementos que
entran en juego durante una partida de póker.
Para que cualquier jugador opte a
la victoria será necesario que reúna una dosis de cada elemento, por lo que
vamos a hacer un repaso por las formas en las que se fraguan las mejores
estrategias para ganar al Texas Hold’em, que en póker y a nivel mundial es
la modalidad más jugada y conocida tanto en soporte físico como en salas
online.
Lo cierto es que no existe una
fórmula mágica que nos permita crear estrategias de póker para el Texas Hold’em
infalibles. Lo bueno que tiene el póker es que, aunque la suerte juega un papel
importante, suele ser bastante justo en cuanto al nivel de habilidad
que exige y las posibilidades que hay de llevarse un buen premio.
No obstante, independientemente
del nivel de experiencia que tengas o de las horas que le hayas dedicado, debes
saber que hay cuatro pilares básicos sobre los que se sustentan las reglas de
toda estrategia de póker: la cautela, la agresividad, la previsibilidad y la
capacidad de aprovechar los errores de los contrincantes.
Pero todo esto no funciona por sí
mismo: es necesario combinarlos en las dosis perfectas para que dé como
resultado una estrategia de póker y de Texas Hold’em enteramente válida.
Solo la experiencia y el instinto
que cada jugador desarrolle con el tiempo le permitirán moldear las mejores
estrategias para Texas Hold’em durante una partida de póker. Y es que, lejos de
regirse por una fórmula mágica e invariable, las estrategias de póker (en Texas
Hold’em y cualquier otra variedad) van moldeándose hasta llegar un punto en el
que el instinto del jugador impulsa al subconsciente a interpretar de forma
automática los rasgos más relevantes de la partida.
La experiencia permite
desarrollar ese instinto, que a su vez es vital para que las estrategias sean
las adecuadas y estas vayan fluyendo durante el devenir de la partida. Por eso,
lo mejor que un aficionado al póker puede hacer es practicar, practicar y
practicar. Solo así se desarrolla ese instinto que permite leer
correctamente las partidas, y sin el cual resulta muy complicado saber leer
las señales que dejan entrever un farol o una buena mano.
Uno de los aspectos que más
influyen a la hora de ajustar la estrategia durante una partida es el lenguaje
corporal de tus adversarios. Aunque pueden dar señales equívocas de sus
intenciones o de sus probabilidades de obtener una buena mano, lo cierto es que
tener entrenada esta capacidad permite acertar con una mayor probabilidad de
éxito a la hora de no tomar riesgos innecesarios o de descubrir a un farol.
Pero no olvides que, además de
saber leer el lenguaje corporal de los demás, es igual de importante no dar
pistas a los rivales durante la partida. Es una habilidad que va en doble
sentido y que únicamente se domina con experiencia y un gran número de partidas
disputadas a la espalda.
Uno nunca sabe con qué perfil de
jugador va a sentarse en la mesa, pero puede ocurrir que todos los rivales
de la mesa sean auténticos depredadores que busquen desplumar a las
primeras de cambio a sus contrincantes.
En este tipo de partidas lo mejor
es extremar las precauciones y pecar de cauto, ya que lo primordial, sobre todo
si estás dando tus primeros pasos en el póker, es que no pierdas todo el
stack.
Si hay una cosa que debes
entender acerca de las estrategias para Texas Hold’em es que en póker no hay
una táctica que funcione bien en todo tipo de partidas. Con esto queremos decir
que es un error caer en la tentación de repetir la misma estrategia que has
usado en una partida previa para tratar de emular el éxito obtenido con
anterioridad, cuando lo mejor será que analices las variables detenidamente
para tratar de acertar con la estrategia.
Unas veces te saldrá bien, pero otras
no: en póker, lo de repetir una misma estrategia en mesas diferentes y con
perfiles distintos de jugador casi nunca da buen resultado, por lo que
desecha la idea cuanto antes.
Ninguna estrategia de póker, ni
en Texas Hold’em ni en ninguna otra modalidad, surge de la nada. En mayor o
menor medida, las matemáticas siempre están presentes en una partida de
póker, y también lo están en el plano estratégico.
La probabilidad no es más que la
punta del iceberg de todo el conglomerado de conocimientos matemáticos que te
hará falta dominar para comprender a fondo las dinámicas de una partida de
póker, por lo que esfuérzate no solo a la hora de mantener una disciplina
que te permita jugar de manera recurrente en las mesas asumiendo los
riesgos justos, sino también en cuanto al estudio teórico de las bases
matemáticas del póker. Te serán de enorme utilidad a la hora de dar forma a
nuevas y exitosas estrategias de póker durante una partida de Texas Hold’em.
En póker, se entiende por “tilt”
el hecho de perder el control debido a la aparición de una emoción de alta
intensidad. Normalmente, esto suele suceder por un revés imprevisto,
pero también puede suceder por cualquier otro factor ajeno a la mesa, sí, pero
igualmente perceptible para el jugador, por lo que mantener a raya las
emociones suele ser un aspecto fundamental para optar a la victoria.
Cuando se dice que hay que “poner
cara de póker”, normalmente se entiende como mostrar una nula expresividad
facial para no dejar entrever las emociones ni los pensamientos del jugador,
pero pocas veces se interpreta no solo como la capacidad de limitar la
expresividad facial y corporal, sino como la habilidad de limitar el impacto
de las emociones en todo el cuerpo.
En otras palabras: para los
mejores jugadores de póker del mundo este juego no va de disimular que no se
tienen emociones; claro que se tienen, somos humanos y no podemos evitar
sentir. Para ellos, de lo que va es de entrenamiento mental, de autocontrol
y de disciplina. Limitar la capacidad de las emociones para afectarnos en
distintos planos es algo de gran utilidad no solo a la hora de jugar al póker:
también puede ayudar en otros ámbitos de la vida cotidiana.
Por tanto, es importante evitar caer en la desesperación cuando surja un imprevisto o cuando exista un factor de cualquier naturaleza que nos afecte en sentido negativo. Si no, por muy buena que haya sido nuestra táctica hasta el momento, daremos al traste con la estrategia de póker que estábamos siguiendo durante la partida de Texas Hold’em.
Guía básica de Texas Hold’em P1: Texas Hold’em, su historia
Guía básica de Texas Hold’em P2: Reglas Texas Hold’em
Guía básica de Texas Hold’em P3: Clasificación de manos Texas Hold’em
Guía básica de Texas Hold'Em P5: Cómo jugar desde el dealer en Póker Texas Hold’em
Guía básica de Texas Hold'Em P6: Errores más comunes que cometes jugando a Texas Hold'em
Guía básica de Texas Hold'Em P7: Mejores torneos de Texas Hold’Em
Robbi Jade Lew VS Garrett Adelstein…El escándalo del #J4GATE sigue siendo investigadoHa pasado más de un mes desde que una explosiva acusación de trampa revolucionó el mundo del póker. Ahora se esp...
Nada más ver los naipes de póker se nos viene a la mente una partida de póker formando manos y pensando en estrategias para cada calle. Pero hay más juegos aparte del póker que se pueden disfrutar...
Si hay una posición emblemática en una partida de Texas Hold’em, sin duda esa es el dealer. Situado justo antes de las ciegas, su popularidad viene por ser el último en hablar durante las partidas,...