A pesar de que muchos jugadores
comienzan a jugar en el póker online en la modalidad Hold’em sin límite, muchos
buscan dar el salto al Omaha. En esta variante, donde la gestión de los botes y
del bankroll son aspectos fundamentales para no perder el dinero acumulado, las
mejores manos no son siempre AA** y KK**. En Texas Hold’em es habitual
acostumbrarse a acumular preflop KK y AA en cualquier situación, algo que en el
Omaha puede ser todo un error.
En la variante del póker Omaha,
las manos ganadoras pueden ser otras. Hay que tener en cuenta que aquí se nos
reparten cuatro cartas, no dos, y puede resultar arriesgado acumular cartas
KK**.
En la modalidad Omaha de póker,
las manos con más probabilidades de éxito durante el preflop no son las mismas
que en Texas Hold’em. Ten en cuenta que aquí la forma de pensar es otra, tiene
que estar centrada en la gestión, y que jugamos con dos cartas más.
Por eso, en la variante de póker
Omaha, las manos ganadoras son siempre double suited, es decir,
tienen que estar emparejadas por el color. Para que conozcas las mejores manos
en el Omaha, hemos confeccionado una tabla donde podrás consultar, por bloques,
cuáles son en la modalidad Omaha de póker las manos con más probabilidades
de éxito.
Mejores manos Del 1 al 10 |
Mejores manos Del 11 al 20 |
Mejores manos Del 21 al 30 |
A A K K |
K Q J T |
Q Q A K |
A A J T |
K K T T |
Q Q A J |
A A Q Q |
K K A Q |
Q Q A T |
A A J J |
K K A J |
Q Q K J |
A A T T |
K K A T |
Q Q K T |
A A 9 9 |
K K Q J |
Q Q J T |
A A x x |
K K Q T |
Q Q J 9 |
J T 9 8 |
K K J T |
Q Q 9 9 |
K K Q Q |
Q Q J J |
J J T T |
K K J J |
Q Q T T |
J J T 9 |
Pero para saber si nuestra mano
es buena para jugar el preflop no basta con echar un vistazo a la tabla:
tendremos que analizar otros elementos que influyen en lo buena que puede
llegar a ser una mano. Y es que uno de los conceptos básicos de la modalidad Omaha
de póker es que las cartas trabajan todas juntas para formar una mano,
aunque solo se pueden utilizar dos de ellas en realidad para formar una mano.
En realidad, los jugadores más
experimentados toman estas cuatro cartas como cuatro fuentes de información
posibles para aspirar a ganar botes. Además, muchas de estas variantes
pueden parecer perjudiciales cuando en realidad podemos aprovechar las
cartas de otra manera para convertirlas en una mano ganadora.
Hay tres términos que es
necesario conocer a fondo para mejorar nuestras posibilidades estratégicas en
el póker: danglers, blockers y rundowns. Para
comprenderlos, es necesario recordar uno de los principios básicos del póker
Omaha: las manos ganadoras se obtienen cuando las cuatro cartas trabajan
juntas.
Uno de los términos más usados en
la modalidad Omaha de póker es el dangler. En español, se correspondería con la
“carta colgada”, una carta de bajo valor que no es en absoluto de ayuda para
la mano de cuatro cartas.
Una carta alta puede ayudar a
conseguir una mano potente, como un trío de ases o un full. En
cambio, una carta baja no permitirá mejorar esa mano, por lo que se quedaría
“colgada” al no poder ser utilizada para ninguna jugada.
Las manos con un dangler son,
por lo general, bastante foldables. La excepción viene cuando estamos en
una posición tardía como el botón, desde la que hay una excelente oportunidad
de robar las ciegas.
Por lo que respecta a los
bloqueadores, estas son cartas que evitan poder hacer una buena jugada. Su
nombre le viene al pelo, porque se trata de cartas que bloquean cualquier
posibilidad de exprimir las posibilidades de la mano potencial que podías
formar con su ayuda. Los blockers tienen el poder de debilitar nuestra mano
del preflop, ya que reducen las posibilidades de que salgan las cartas que
necesitamos en la mesa.
Por último, hablemos de los
rundowns. En el póker Omaha se entiende por rundown una serie de cuatro
cartas en orden secuencial colocadas sin saltos. Con más o menos atino, en
español son conocidas como “reducciones”, un término que se refiere a lo mismo:
cuatro cartas del mismo palo colocadas en orden secuencial.
Estas cartas tienen un enorme
potencial en caso de que en la mesa no haya cartas dobladas. Y es que el
principio es el mismo: las cartas funcionan mejor cuando son de doble palo,
algo que también se aplica a los rundowns.
En una partida de póker Omaha, los
dos jugadores ubicados a la izquierda del croupier hacen las apuestas ciegas.
Esto ocurre porque así se aseguran que hay dinero en el bote antes de comenzar.
El primero de los jugadores apuesta la ciega pequeña y el otro la ciega grande
que, como siempre, es el doble de la pequeña.
Durante cada ronda de
apuestas, el juego se desarrolla en base a cuatro movimientos básicos: check,
raise, call o fold, términos prácticamente universales en el póker. Si eres
muy novato jugando al póker, debes saber que hacer check es pasar, hacer raise
es subir la apuesta, hacer call es igualarla y hacer fold es abandonar.
Los jugadores que sobreviven
en la ronda final de apuestas pasan al showdown, el momento de la
confrontación final donde cada jugador muestra las cartas. Como dictan las
reglas y el sentido común, la mano más alta es la vencedora y la que se lleva
el bote. En caso de empate, el bote se divide entre los jugadores que han
igualado la mano.
Ahora bien, en la modalidad Omaha
de póker hay tres formas de apostar: con límite fijo, sin límite y con
límite en el bote. Son más conocidas por sus nombres en inglés: Fixed Limit
(límite fijo), No Limit (sin límit) y Pot Limit (límite en el bote).
Aunque no estés acostumbrado a la
variante Omaha, se serán familiares estas formas de apostar. Para empezar, en
las partidas con límite fijo las apuestas son iguales a la ciega grande en el
preflip y en el flop, aunque durante el turn y el river se duplican.
En la vertiente sin límite, este
lo fija la cantidad de fichas de las que disponga el jugador, ya que puede
apostarlas todas en cualquier momento. Se toma como límite mínimo de la
apuesta el valor de la ciega grande.
En cuanto a las partidas de Pot
Limit Omaha, los jugadores pueden apostar en cualquier momento la cantidad que
hay en el bote. Al igual que en la versión sin límite, la apuesta mínima es
igual a la ciega grande.
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