En las apuestas deportivas los
conceptos de “back” y “lay” suelen ir juntos y están asociados a las apuestas
que se hacen en un sentido o en otro. Son muy comunes en partidos donde
compiten dos equipos, aunque algunas bookies pueden permitir “backear” o “layear”
las apuestas en otros eventos deportivos donde haya más de un equipo
involucrado.
Los conceptos back y lay en
apuestas deportivas están asociados a lo que a veces se conoce simplemente como
layback, un concepto asociado a los usuarios con experiencia por ser
casi siempre quienes hacen uso de estas apuestas.
Antes de continuar, vamos a
aclarar conceptos: lay y back son antónimos, pero el término “layback” se
emplea como sustantivo par referirnos a las apuestas lay / back.
Al hablar de lay y back, nos
referimos a un tipo de apuesta en el que se apuesta en contra o a favor de un
equipo. Es decir, se apuesta a que un equipo gane o pierda. Su esencia
es muy sencilla, pero el modo para extraer todo el potencial a las apuestas
back / lay es lo que hace que sean predominantemente los apostadores
profesionales quienes saquen mayor tajada de este tipo de bet.
Algo importantísimo para entender
cómo funcionan las apuestas lay es que se apuesta la cantidad que se quiere
ganar, no la que se quiere arriesgar. Este concepto tan básico es el que
muchas veces lleva a error a quienes dan el salto desde otros tipos de apuestas
y se lanzan de lleno a las apuestas lay. Al errar en la cantidad que ponen en
juego, el resultado está lejos de ser el esperado.
Para acertar con el lay en las
apuestas deportivas es fundamental seguir una simple regla matemática para
obtener la cantidad deseada que queremos ganar. Y, sí: la cantidad que
“queremos” ganar depende también de una fórmula, porque no es solo lo que
queremos ganar, sino lo que podemos permitirnos apostar para buscar la
victoria. Cualquier apuesta fuera de esos márgenes no tiene garantizada en
absoluto la viabilidad en las apuestas lay.
¿Cómo calculamos el layback?
Ganancias = (Cantidad
deseada x Cuota) – Cantidad deseada
Guiarse por el layback en
apuestas tiene sus ventajas e inconvenientes. Principales ventajas:
No obstante, tiene sus hándicaps
también:
Las apuestas back y lay son,
respectivamente, apuestas hechas a favor o en contra de que un equipo gane. Sin
embargo, algo que parece un 50-50 que podemos dejar al azar no es algo
que dependa solo de la suerte.
Lo elemental si queremos dejar de
perder dinero es entender que una apuesta layback permite obtener ganancias
efectivas siempre y cuando sepamos tener nuestro bankroll bajo control.
Si no, no evitaremos perder y nos expondremos a una falta de fondos para seguir
apostando.
Por tanto, es fundamental fijar
un tope en la cantidad que apostemos, teniendo en cuenta la cantidad necesaria
que queremos ganar y cuál es nuestro stack.
Pero los tiempos son cruciales en
este tipo de apuestas, tanto si apostamos a favor o en contra. Normalmente, los
usuarios profesionales tienden a realizar sus apuestas back / lay en momentos
estratégicamente escogidos: por ejemplo, más tarde del minuto 75 si existe
un empate, o en los últimos minutos si un equipo va por delante, ya que
tendrás más probabilidades de hacer una apuesta back a favor del aventajado.
¿Cómo tener una mayor
probabilidad de exprimir el potencial de la apuesta? Haciendo un buen análisis.
Al igual que ocurre en juegos como el póker, tener una gran capacidad analítica
para mejorar la toma de decisiones es crucial. Nuestro juicio será clave para
fundamentar la decisión de hacer una apuesta back o lay en un momento concreto
del evento.
Principalmente, ese es el motivo
por el que las apuestas de layback no son aptas para usuarios inexpertos. Esa capacidad
analítica no se obtiene de la nada: hace falta experiencia y estar curtido
para poder juzgar correctamente las probabilidades que se tienen de sacar más
partido a una apuesta back / lay para dar en el clavo. Si no se tiene, la toma
de decisiones no será la adecuada, y quedaremos expuestos a un flujo de
pérdidas constantes.
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